martes, julio 10, 2012

EL CAMINO QUE LLEVA A UN CURIOSO REPORTAJE DE VER PARA CREER.

UNO DE LOS REPORTAJES MÁS CURIOSOS PRESENTADO RECIENTEMENTE EN  LA TELEVISIÓN COLOMBIANA LO DIFUNDIÓ EL PROGRAMA "TESTIGO DIRECTO" DEL CANAL CARACOL Y CARACOL INTERNACIONAL Y SE LLAMÓ "CARAMELO: EL BURRO QUE SE CREE CABALLO". COMPARTIMOS ESTA PEQUEÑA CRÓNICA DEL DETRÁS DE LA HISTORIA. EL AUTOR ES NUESTRO EDITOR GENERAL.

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El domador Carlos Román y "Caramelo", el único burro en el mundo que practica equitación. 

Momentos de la grabación en Andalucía, sur de España.

 Por Héctor Sarasti
Editor General
EL COMENTARISTA
La noche de ese sábado de otoño del 2012 helaba hasta tiritar al paso de que el vetusto coche, que bordeaba las entrañas de las estribaciones de La Sierra Nevada, en Granada,  sur de España, no se cansaba de avanzar en ese ambiente que bordeaba los  -1 grados centígrados…
El reloj del auto digitaba la “1:00 a.m.” mientras el otro reloj, el mental, indicaba que el encuentro para el reportaje del burro “Caramelo” comenzaría a las 6 de la mañana en el estacionamiento del  Centro Comercial Carrefour, en Jerez de La Frontera, Andalucía, cuando recogería al camarógrafo que tiene, singularmente, el nombre del descubridor del Río Amazonas: Francisco Orellana, quien compartiría su amplia experiencia en el mundo de la imagen con un callejudo reportero que jamás pues pierde la esperanza de hacer su oficio -el que ama infinitamente- el de periodista.
El cálculo matemático indicaba que la división entre 700 kilómetros de distancia y la velocidad promedio dejarían al periodista hacia las 5 de la mañana en la entrada de Jeréz, la cuna mundial del refinado licor que lleva su nombre y, por extensión geográfica, del  Descubrimiento de América.
Pasada La Sierra Nevada, el viaje ya sumaba 4 horas desde el sur de la Provincia de Alicante, Valencia, y solo era asunto de conservar la velocidad indicada y descansar cada dos horas unos 15 minutos para agotarse lo menos posible. El recorrido llevaba por las autovías A-7, A-45 y A-4. Todos los tramos que unen dos puntos muy distantes y distintos  de la España de hoy  como es el Este y el Sur, los mismos puntos que hace 2 mil años dividieron los romanos, llamándolos en algún momento “Hispania Bética” e “Hispania Cartaginense”, los que tejieron de caminos (calzadas romanas) para pasar gente, comida, tropas y armamento para conquistar, dominar y expandir su imperio.
Nos estrechamos la mano apenas nos identificamos a las 6 en punto de la mañana en el citado estacionamiento.
Nos conocíamos por teléfono pero jamás nos habíamos visto en persona. Dialogamos unos momentos: Le comenté los detalles de lo que consideraba era la parte periodística del reportaje que me había llevado a viajar tan lejos y, a su vez, él manifestó su opinión sobre la parte técnica que, dicho sea de paso, manejaría con una experiencia y una experticia de la que estoy hoy inmensamente agradecido.
Grabaríamos en formato NTSC (americano) y no en PAL (Europeo). Las tomas irían 10 mil kilómetros más allá de donde nos encontramos y debíamos tener en cuenta parámetros de grabación específicos para que el material filmado pudiera ser reproducido a la hora de editarse en la ciudad colombiana de Bogotá.
Él sacó del baúl de su moderno automóvil el trípode, la cámara Panasonic  500 P2P y un par de morrales y los pasó al coche que llevaba el que redacta estas líneas. De mi parte, reacomodé las dos cámaras réflex que llevaba (EOS 500D y EOS 600D) y poco más. Estábamos listos.
En ese transitar entre Jeréz y la población de Montellano, Sevilla, hablamos cada uno de lo suyo. Él de lo que consideraba era su oficio y yo, el mío.  Se pasó la hora y arribamos  a Montellano,  la población con más toros de lidia por kilómetro cuadrado de todo España e igual el mayor asiento de caballos de doma o equitación andaluza del mundo.
Estuvimos todo el día haciendo reportería. El dueño del burro menos burro ayudó más de lo deseado. Al final, acabamos el reportaje. Quedaba así cerrado un reportaje que hoy ven miles de personas alrededor del mundo. Gracias.
Héctor Sarasti. Día del reportaje.

El camarógrafo Fran Orellana, en acción.
CAMPAÑA DE EXPECTATIVA
TESTIGO DIRECTO


CRÓNICA
"TESTIGO DIRECTO"
"EL BURRO QUE SE CREÍA CABALLO"